Anuncia la noche en un
tibio soplo,
Llegando en ella mi alma
Sosegada y vagabunda en
busca de tu sed.
Tú,
Desnuda en tu cama,
Yo,
Mudo e inmutable
Mientras que nuestros
sentidos
Aferrados y callados
Acarician suavemente
Las fraguas infinitas de
lujuria
Que se enardecen en
nuestra piel.
Dulce cabello de ángel
Colgado en el inmenso
cielo,
Deja que tu luna se pose
sobre tus pechos
Evidenciando
Las ganas de tenerte,
Intocable epifanía de tu
divina esencia,
Verdugo de mi control,
Desata mi lengua
Y haz que pierda la
razón.
¿Mi lengua?
Si…
Posándose en la sabana de
tu vientre
Terso y caliente,
Embriagándome de tu
vino
Que mi calor más
enciende,
Recorriendo tú oriente,
Tú occidente,
Tú norte,
Tú sur,
Al sur…
Más al sur lentamente
Y con un grito perdido en mis manos
Hiere las sabanas con tus
uñas
Y gime como loca,
Muerde mi anular,
Dilata tus pupilas,
Sofócame en tu mar,
Que pronto quiero
desbocarme
En tus entrañas sin
avisar.
Morder tu cuello
Y escuchar la canción enardecida
de tu corazón,
Sentir tus piernas
estrangulando mi espalda
Para luego alzar vuelo
Dejando que tu inocencia
observe desde el espejo
Como aquella niña de ojos
tristes y callados
Se pierde en su propia
endorfina.
Tócame,
Siénteme,
Déjame besarte como un
animal hambriento
Y someterme a ese manjar
Que me ofrece tu cuello,
Y decirte al oído
Tímidas palabras como si
fuera un niño,
Y sentir tus caderas
Como si hubieras
enloquecido.
Ven,
Acércate mucho más,
Déjame ver tus
desorbitados ojos
Como se esconden en tu
sonrisa,
Dibuja en mi rostro con
tus labios
Que el tiempo no existe,
Que mi tiempo contigo no
ha terminado.
Y me hundo en tus senos,
Encendiéndome con tu
calor
Y posees mi alma
desquiciada de tu ser
Y escribes con tus jadeos
Poemas que no quieren
terminar,
Y las estrellas
Y la luna
Y el cosmos
Y tú
Y yo
Quieren ser por un eterno
instante
Uno con el todo y con la
nada
Y esfumarnos con el
silencio
Y debajo de tu ombligo se
desata un caos
Que desgarra abruptamente
mi cuerpo.
Uno,
Dos,
Tres contracciones se desatan súbitamente
Anunciando el alba
Del portal de tus sueños.
Como hojas secas resbalas
sobre mi pecho
Y una canción de cuna
Susurro en tu pequeño
lecho.
Esta cama esta más que
viva,
Te siento toda,
Te siento mía,
En silencio,
En mis brazos,
Soy tu sombra amante mía.